21 Abr La salida de Mulino
José Raul Mulino estuvo preso seis meses en la sede de la Policía Nacional y ahora aunque puede andar libremente por todo el país no puede salir de Panamá porque enfrenta un proceso por lo que el ministerio público ha determinado como “compra irregular” de los radares a la empresa italiana Finmecanicca.
La salida de Mulino si bien es cierto fue por una orden judicial, el espectáculo de caminar a la calle desde las entrañas de la sede policial fue político.
Camacho y sus copartidarios llevaron banderas de Cambio Democrático capitalizando el momento precisamente en días que el presidente Varela está por Asia viendo asuntos de la línea 3 del metro.
Entro a lo que me hizo escribir y a lo que seguramente algunos quieren leer y es acerca de las voces que gritaban “Mulino presidente”
La detención de Mulino fue la más cuestionada desde el principio en comparación con la de otros ministros del gobierno de Martinelli, también hay que decir que fue la última de una seguidilla de arrestos sin precedentes en la historia del país, que en un momento llegó a tener 5 ex ministros presos y a un magistrado de la Corte Suprema de Justicia.
La premisa de que los últimos serán los primeros le sirvió a Mulino mediáticamente, además que su figura levantaba más pasiones por su carácter mientras fue ministro, en una cartera que difícilmente permite ser dulce o blando para arrancar sonrisas, Mulino rofeaba y rofeaba duro, y ese rofeo lo llevó a la cárcel, culpable o no, fue a la indagatoria y no salió.
Esa arrogancia para algunos sería el lastre que debe cargar Mulino si se le ocurre participar en una carrera por la presidencia, pero algunos dirán que si los creadores de imagen pudieron endulzar a una figura con el temperamento de Perez Balladares, Mulino es un paseo, aunque ese rofeo puede ser útil en la campaña que viene, recordemos que el estilo de Varela es más tranquilo y al panameño le gusta el pleito (por algo hemos tenido 30 campeones mundiales en boxeo).
Mulino nunca ha corrido para un puesto de elección, pero ninguno de los últimos presidentes tampoco lo hizo por un puesto distinto al de presidente. Ha sido presidente del partido SOLIDARIDAD y después de Unión Patriótica y ahora vicepresidente de CD pero no ha pasado por el rigor de una campaña interna como las que hace el PRD o el Panameñismo.
El ex ministro de seguridad lleva a cuestas los sucesos de Bocas del Toro y la Comarca Gnäbe, y no se sabe si salga bien librado judicialmente del caso Finmecanicca o algún otro que aparezca en el escenario.
Las encuestas de Dichter & Neira recientes han dejado claro que no hay un líder de oposición y Ricardo Martinelli por más que suene no puede ser candidato en 2019.
No se sorprendan si Mulino llega a ser candidato en 2019… que gane es otra cosa.
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